Mi imagen me persigue

Hoy he vuelto a aprender por enésima vez desde que me conozco que soy una bocazas. Manifiesta a tus amigos lo que piensas de ellos con demasiada sinceridad y date por muerto. Ahora resulta que soy yo la que ha insinuado que había que borrar a Belén de la famosa lista de amigas (que por otra parte nunca ha existido, digo la lista). Hago un llamamiento a todas aquellas personas del sexo femenino que han participado en los últimos meses en las diversas actividades que se han organizado para que manifiesten aquí, públicamente, cuantas veces he dicho yo semejante cosa. Particularmente a Sol, que ha constatado en numerosas ocasiones que no había manera de que de mi boca, ni de las demás presentes, saliera una mala palabra para calificar a Belén. Por favor, que se haga justicia para esta pobre funcionaria opositora que tiene demasidas cosas en las que pensar como para que este tipo de tonterías de colegio la tengan ocupada. Lo peor es que consiguen ocuparme.