lunes, septiembre 22, 2008
La Facultad
Hoy he vuelto a la facultad, después de más de 10 años. Ha sido para hacer un curso sobre morfosintaxis que parecía un rollo, pero que luego ha resultado ser interesante, por lo menos la primera sesión. Pero lo más emocionante ha sido volver a reencontrarme con el espacio donde estudié la carrera. Sol y yo hemos entrado cogidas del bracete y diciendo, madre mía, madre mía. Todo está igual, los baños tan cutres, la cafetería apestosa, los banquitos donde nos sentábamos a repasar los apuntes de Historia de la Lengua, con sus pelusas eternas en el techo (deben estar allí desde que Raimon dio su famoso concierto en el que cantó Al vent), los bancos de piedra donde Estela "conocía" a su novio de entonces, las aulas donde nos torturaban los profesores, los corchos donde colgaban las notas, el mismo librero, catorce años después, diciendo las mismas cosas... En fin una realidad que permanece a pesar de que ya ha pasado mucho tiempo, y que me ha gustado reencontrar ahora que ya he cumplido el objetivo que me llevó a estudiar Filología: he vuelto al edificio B siendo profesora.
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